Según un estudio del Instituto Tecnológico de Producto Infantil y Ocio, el 82% de los niños de 0 a 12 años juega al aire libre menos del tiempo recomendado por los expertos, unas dos horas diarias.
La desconexión de la naturaleza puede ser un factor determinante para sufrir dolencias cardiovasculares, miopía, estrés, ansiedad e incluso depresión.