Te sientas en el sofá, pones una serie y te percatas de una cosa: la falta de actores y actrices racializados con papeles relevantes sin clichés. El audiovisual español pasa por un momento dulce, pero aún queda mucho camino a recorrer para que las minorías se sientan representadas en los contenidos que consumimos. Yeison García lucha para que haya visibilidad afro que refleje la pluralidad racial de nuestro país, tanto en el entretenimiento, como en las posiciones de poder.

Cuando Yeison García empezó a estudiar Ciencias Políticas en la universidad, se dio cuenta de que era la única persona negra en el aula. Nacido en Colombia hace 30 años, actualmente vive en Madrid, desde donde articula su pensamiento y su activismo a través de la gestión cultural, las ciencias políticas y la poesía. “Me di cuenta de que muchos de los interrogantes que se planteaban en la carrera sobre las luchas sociales se daban en torno a ejes como la clase y las desigualdades sociales, pero nunca se tocaba nada relacionado con lo racial o lo migrante”.

Fue a partir del segundo año de carrera cuando Yeison empezó a investigar por su cuenta. Documentales y charlas abrieron en él nuevas perspectivas. Hoy en día Yeison es licenciado en Ciencias Políticas y es autor del poemario ‘Derecho de Admisión’. Su trabajo como activista se centra en la coordinación de la asociación Conciencia Afro y la dirección del Centro Cultural Espacio Afro. Ambas iniciativas están estrechamente vinculadas, y responden a las inquietudes que a Yeison le surgieron hace años, cuando empezó la universidad, pues se articulan a través de propuestas que tienen que ver con la cultura y el activismo de base. 

Conciencia Afro empezó cuando un grupo de creadores afrodescendientes se unieron para desarrollar pensamiento y acciones colectivas con la misión de concienciar a la comunidad afrodescendiente en España sobre la necesidad de recuperar la participación en las instituciones políticas y culturales.“Tenemos una escena y un tejido cultural profundamente blanco que no tiene en cuenta a los artistas locales migrantes y racializados que ya están haciendo un trabajo increíble”, cuenta Yeison. La clave está en difundir una idea sencilla pero poderosa: las cuestiones raciales y la cultura afro también forman parte de la realidad de nuestro país. 

Actualmente, las instalaciones de Conciencia Afro llevan por nombre Espacio Afro y forman un espacio híbrido de coworking e intercambio de ideas para la comunidad negra, donde se gestan actividades como presentaciones de libros, talleres y charlas, y donde también se organizan campamentos urbanos afro para que niños y niñas tengan espacios seguros para aprender, relacionarse y divertirse. Es un espacio de inclusión, no de exclusión, por lo cual todo el mundo que quiera pasarse a alguno de sus talleres o actividades, como clases de baile o teatro, es bienvenido.

Además, Conciencia Afro cuenta con voces conocidas como la periodista Lucía-Asué Mbomío Rubio y organiza un programa de residencias en los que se acompaña a cuatro proyectos de creación artística afro. Como bien intuyó Yeison cuando aún era un joven estudiante, hacía falta que las personas afrodescendientes alzaran la voz y empezaran a crear según su propia mirada y experiencia. Lo que tal vez Yeison no sospechaba es que él sería una parte activa de este cambio.