Eliminar los estigmas del pueblo con una revista

Irse al campo parece haberse convertido en la solución y vía de escape de todos los males de la ciudad. Pero, incluso entre aquellos que eligen irse al pueblo, persiste una visión simplista y estigmatizada de lo que ocurre en el entorno rural. Por suerte, la Revista Salvaje viene a enseñarnos a través de historias reales que los pueblos y el patrimonio natural español son mucho más de lo que imaginamos. 

La ciudad ya no es ningún oasis: los alquileres están desorbitados y la contaminación y la precariedad están a la orden del día. Anhelamos una vida mejor y escaparnos al pueblo se convierte en una alternativa. Y, aunque el teletrabajo nos lo pone más fácil, según el análisis titulado El acceso a servicios en la España rural, la España rural está a la cola en cuanto a servicios o alternativas laborales. Y los jóvenes se van precisamente por este motivo. Pero, ¿qué pasa con los que se quedan? ¿Y con los que vuelven? ¿Pueden los jóvenes vivir en el campo sin sentir que se pierden una parte fundamental de su vida? ¿Es la alternativa sostenible que necesitamos?

“Cuando pensamos en vivir en el pueblo, en el campo, en la naturaleza, nos imaginamos unos habitantes estereotipados y lo relacionamos siempre con la pobreza y la falta de desarrollo. Sin embargo, en España hay paisajes increíbles”. En 2019 Guillermo López se marcó el reto de mostrarlos como lo que son: lugares interesantes y llenos de historias personales que pueden cambiar nuestra percepción sobre la vida en plena naturaleza. Y lo hizo con algo aparentemente sencillo, una revista, la Revista Salvaje, en la que el periodismo a fuego lento ha logrado crear una creciente comunidad en España alrededor de la vida rural, y sobre todo, alrededor de un estilo de vida mucho más acorde con la sostenibilidad y con nuestro propio bienestar físico y mental. 

Tras unos años viviendo en Estados Unidos, Guillermo se dio cuenta de que el contacto con la naturaleza le ayudaba a regular su ansiedad. Poco después decidió mudarse a un pequeño pueblo de Castilla, de solo cuatro habitantes. Allí, además de entrar en sintonía con el entorno y consigo mismo, se percató del gran orgullo por el patrimonio natural y el paisaje que hay en España, y cómo los medios de comunicación tradicionales ignoran nuestros bienes: “Hay vida más allá de las ciudades. Y hay historias sobre el entorno rural que los medios no cuentan”. Cientos de historias que, de conocerse, ayudarían a repoblar la España vaciada y aumentar la conciencia ecológica en nuestro país. 

Con 15 números trimestrales a sus espaldas y un podcast en colaboración con Carne Cruda, la Revista Salvaje lleva cuatro años contando la vida infinita más allá de las ciudades. “Queremos eliminar los estigmas y borrar la mirada paternalista sobre la vida en el pueblo y sus habitantes”, dice Guillermo, “y lo hacemos ejerciendo un periodismo de verdad que no está a merced de los algoritmos y con multitud de formatos”. Y es que la Revista Salvaje es una morada nueva sobre el mundo rural y la naturaleza, con historias nunca antes contadas en forma de reportajes, ensayos, viñetas, desde el humor y hasta con infografías. Pero quizá una de las cosas más interesantes del proyecto es su coherencia, algo que se nota en cada fotografía, en cada frase y hasta en el tacto del papel. “Trabajamos de forma artesanal, sin prisa y sin interrupciones, sin notificaciones”. 

En resumen, la Revista Salvaje es mucho más que una revista que se puede encontrar online y en más de 80 librerías y tiendas de España: es una comunidad de 30.000 lectores y 20.000 seguidores en Instagram que de forma natural está saliendo de su crisálida. En el futuro será un ecosistema de personas que compartan actividades como conciertos, talleres, formaciones y charlas; una plataforma de contenido divulgativo audiovisual desde el campo para el campo, para aquellos que ya lo habitan, para los que lo hacen de vez en cuando, y para aquellos que sueñan con hacerlo.