Médicos Sin Fronteras fue fundada en 1971, a raíz de la secesión de Biafra, por un pequeño grupo de médicos y periodistas franceses que buscaban ampliar la accesibilidad a la atención médica más allá de las fronteras nacionales y sin distinción de raza, religión, credo o afiliación política, defendiendo el ejercicio de la ayuda humanitaria como un derecho